Páginas

lunes, 27 de febrero de 2023

Tiburonera (Barcelona).

 

Tiburonera. (Barcelona).


El Parque Zoológico de Barcelona, pidió a Ramón Luis, que cito en varias ocasiones en el blog, el proyecto de un acuario para tiburones, que éste bautizó como Tiburonera.

Ramón Luis me pidió asesoramiento técnico.

No soy nadie ilustre en el tema, pero cuento con el primer libro de divulgación sobre tiburones en el Mediterráneo.

Y tengo un Premio Ciudad de Barcelona de Investigación por ello.

Hay muy buenos catálogos de tiburones mediterráneos, en los que me basé.

Pero no eran accesibles al gran público.

Por eso censuraron el mío. Lo explico en otro lugar del blog.

Ramón Luis realizó un magnífico proyecto, que ni cabía en la cabeza de los técnicos del Zoológico.

Pero el gerente socialista no dudó en apropiárselo y publicar la noticia en una filial catalana de la prensa madrileña. O sevillana.

Naturalmente, no hicieron nada, pues eran insolvente técnica y arquitectónicamente para nada de envergadura.

Ramón Luis y un servidor, hemos concluido con éxito los proyectos que hemos asumido, por nuestra cuenta o en común.

Iré subiendo, algunas imágenes del proyecto de Ramón Luis.

Tiburonera.


Aula del mar de Premiá de Mar.

Memoria del aula del mar, de Premiá de Mar.

Es probablemente la gestión más estéril de cuantas he realizado en este ámbito, a pesar de que el promotor parecía ser un empresario significado de Barcelona, en el ámbito de la náutica.

No voy a dar detalles sobre la persona para no confundir, pues a pesar de conocernos de tiempo, me parece en el fondo era un contador de milongas.

Pero la cuestión es que el edificio con aspecto de faro del puerto de Premiá de Mar, se encontraba sin uso.

Esa persona era miembro de la junta directiva del club náutico.

Y pensó que era una buena opción hacer una pequeña exposición permanente para enseñar a los chavales, cosas relacionadas con la naturaleza.

El club náutico ya realizaba actividades náuticas.

Se trataba de que dar conocimientos de la vida en el mar.

A lo largo de semanas visité el lugar y le elaboré una memoria de actividades y una distribución de espacios y demás asuntos.

Entonces no había cámaras digitales y no hice fotos.

A veces me pregunto si mi subconsciente me decía que no era necesario hacerlas.

Traigo este asunto aquí a modo de experiencia, pero no saqué nada en claro con aquel individuo, que ignoro si todavía hoy merodea por ese mundillo de la náutica o ha perecido ahogado en el proceloso mundo de la apariencia social.

Lo cierto es que hice un proyecto y fue una experiencia y por eso la traigo aquí.

La persona desapareció de mi vida más rápido de como entró.

No tuvo más coste para mí que invitarle a unas cuantas comidas, pues cada vez que quedamos, se había olvidado la cartera.

Conocí por encima a parte de su familia más próxima, todas personas encantadoras, como él.

No sigo porque me sabría mal estar hablando de un muerto.

No cobraba nada por esos asesoramientos ni por nada. Ni dietas ni ningún tipo de costes. Lo mío era puro mecenazgo. Las exposiciones las hacía con ejemplares míos o cedidos temporalmente por terceros. Todavía no he entendido que buscaba aquel empresario con semejante tinglado.

quizás comer de gratis algunas veces.

De eso sí he tenido más experiencias. 


domingo, 26 de febrero de 2023

Navegando hacia el Delta del Ebro. V. Medusa.

 

Aguamala, (Rhizostoma pulmo).

Pan y queso.

Puede parecer una comida frugal y efectivamente si es poco pan y poco queso, lo es.

Pero si es mucho pan y mucho queso, puede llegar a causarnos indigestión.

Por lo que pasaremos de si es una comida frugal o no y lo dejaremos en que es una comida muy nutritiva.

El pan es fundamental en la dieta mediterránea.

Ha sido denostado por los países del Norte de Europa, esos bárbaros venidos a más, por considerarlo comida de pobres.

Han necesitado dos mil años para enterarse de sus beneficios y hoy forma parte de su dieta. ¡Menudos zoquetes!

Y el queso es leche cuajada, que tiene las ventajas de la leche y prescinde de sus inconvenientes.

De por sí, la leche es indigesta porque tiene cadenas grasas demasiado largas, que cuestan de digerir.

Por eso no es aconsejable para niños ni adultos.

Naturalmente no me refiero a la leche materna, que es imprescindible en el crecimiento del bebé.

Al cuajar la leche para hacer el queso, se trocean esas cadenas y se hace más digestiva.

Lo mismo que ocurre con los yogures.

En función de la cantidad, se puede calificar a mi comida de frugal, pero en absoluto de pobre o insana.

Tumbado sobre las colchonetas de la cubierta y con la espalda bien apoyada, voy cortando con la navaja trozos del queso de cabra curado, (más sano que el de vaca) y pellizcando el pan para llevármelos a la boca en pequeñas diócesis.

Mientras, disfruto de un entorno de grises difuminados, que parecen un paisaje en blanco y negro.

A media comida, aparece un invitado no esperado; una gran medusa, la mayor del Mediterráneo, que me dice hola, pero se va enseguida.

No sé qué ofrecerle pues, come plancton que aquí es muy abundante, tanto que esta medusa es común por la zona.

Siento no haber podido ofrecerle nada y quedar como un mal anfitrión.

Me consuelo al pensar que, en realidad la anfitriona es ella y que yo soy, simplemente, un transeúnte.

Sigue lloviznando y voy abrigado porque hace frío.

Estoy muy cómodo, hasta el punto que tentado de ponerme a dormir.

Pero no lo hago porque sería una imprudencia dormirse en una barca al pairo en medio de la nada.

Lo que sí hago es, una vez satisfecho de comida y paisaje, poner manos a la obra para empezar a navegar hacia el fondo de la gola, ignorando y dejando por babor a San Carlos de la Rápita.

Me queda, hasta donde tengo previsto fondear, aproximadamente el mismo trecho que he recorrido desde Las Casas hasta aquí.

Esta noche cenaré un plato de cuchara y podré dormir.

Habré cerrado la quinta etapa (con V de victoria) de este paseo a ninguna parte.

Cuanto tenga tiempo y ganas. intentaré enterarme porqué los romanos significaron con la V al número cinco.

 Postdata: La tontería, del número cinco romano.

La V que representa al número cinco romano, no es la v de victoria que aquí menciono en tono retórico.

El número cinco romano viene del número cinco ático, que era una V invertida.

Los etruscos copiaron ese signo para su cinco y los romanos lo copiaron de los etruscos, pero dándole la vuelta.

Es decir. La pregunta correcta es ¿por qué los romanos invirtieron la V etrusca para designar su número cinco?

Todavía no lo sé.

Pero no me hagas caso, son los sueños de la razón.

sábado, 25 de febrero de 2023

Navegando hacia el Delta del Ebro IV. Nevera.

Nevera de la "Barca Fantasma"

Una vez que he dejado las casas de Alcanar, empiezo a navegar hacia el Norte todo lo despacio que puedo y mi sentido del ahorro me permite.

Ya he dicho que los motores fueraborda, cuando los llevas poco acelerados gastan más que dándoles marcha. Ya comenté que tienen una velocidad de crucero óptima

 Si uno pretende pescar al curry con un fueraborda, el pescado que consiga le va a salir por un ojo de la cara.

Pero una velocidad con el motor a 1000 r.p.s. me parece prudente desde el punto de vista económico. Eso hago.

Por el tiempo que ocupe en la singladura no tengo ningún problema, pues no me espera nadie.

Quiero navegar muy cerca de la costa, pero no demasiado porque no me gusta el aspecto de la línea costera, en la que veo demasiadas rocas.

Ya he dicho que voy seguro porque calo poco, pero me gusta usar cinturón y tirantes e ir bordeando una costa que no me inspira, es ponerme en un riesgo innecesario.

Está chispeando y el cielo está cubierto, pero no amenazador.

Llevo el bimini (toldilla pequeña sobre la bañera) que me protege, pero además coloco la toldilla de proa, para que no me lleguen gotas de lluvia a la cara, pues me ensucian las gafas y eso me incomoda.

La mar está llana y la velocidad me permite cotillear lo que está en  el agua, entre lo que siempre te puedes encontrar sorpresas.

Al principio el ruido de los motores me molestaba, pero me he hecho a la idea de que es un sonido de fondo del mar y he dejado de oírlo

Bueno lo oigo, pero no lo escucho.

Voy sentado relajado y admirando la monótona y siempre cambiante superficie del agua.

En realidad, lo único que tiene que preocuparme son las abundantes boyas de trasmallos y palangres que colocan los pescadores para señalizar sus redes.

Siempre hay que pasarlas a sotavento porque no sabes la cantidad de cabo que han dejado y si ese cabo flota o no.

A veces me he encontrado esas boyas improvisadas, que tienen exceso de cabo, que para colmo flota a ras de agua.

Al menor descuido te lo puedes llevar enredado en la cola del motor. Hay unos accesorios de cuchillas que se colocan para evitar eso, pero no me gustan porque añaden un elemento agresivo a la ya de por sí peligrosa cola de un motor fueraborda.

Llevando todo en orden, esas boyas son el mayor peligro para la navegación dominguera.

Con placidez y monotonía que me permiten pensar en mis cosas, pasa el tiempo hasta que llegó a un punto en que la gola me arropa y pienso que es un momento de parar para mover el bigote.

No hay tráfico, la mar está llana y sin viento. Espero que también sin corriente.

Paro los motores y me voy a buscar al camarote pan, queso y un botellín de agua, que me llevo a proa bajo la toldilla, desde donde domino con un mínimo esfuerzo todo mi entorno.

Algo que me gusta de mi condición, es que soy de poco comer y que me gustan las comidas muy sencillas.

Si pudiera pasar con pastillas nutritivas lo haría.

Antes me gustaban los dulces, pero el cuerpo ya no me los pide y prefiere las lentejas o el pan con algo.

Pan con aceitunas negras es para mí un manjar de dioses.

Y para beber, agua fresca. No todas las marcas son iguales, tengo mis preferidas, pero me allano con cualquiera.

La nevera es lo que más cuido de la barca.  ¡Le he puesto un chivato externo indicándome la temperatura interior!





viernes, 24 de febrero de 2023

Mis Museos.

 

Proyecto de acuario en Lloret de Mar (Gerona).

Bueno, no es que sean míos.

Lo único realmente mío es mi DNI.

¡Y para lo que me sirve!

Son museos que he creado, diseñado, proyectado o en los que he colaborado activamente.

En algunos de ellos, la parte central de lo expuesto, era mi colección de historia natural.

En otros no.

Pongo a continuación enlaces con otras entradas de este blog, en los que hablo sobre ellos.

No relaciono todas las exposiciones temporales  que he montado en locales de terceros, porque la lista nos aburriría. Sólo presento las más importantes por volumen de material expuesto o por audiencia.


****


1980. Proyecto de acuario en Lloret de Mar.

1985. Museo de historia natural y del mar. (Níjar. Almería).

1985. Barcelona i la mar. (local pequeño), en la estación marítima de Mallorca.

1989. Barcelona i la mar (Barcelona y la mar). Estación marítima de Mallorca (local grande).

1991. Minerales y fósiles de Almería. Exposición en el castillo de los Escullos.

1995. Museo de historia natural de Atarfe (Granada).

1998. Aula del mar (Premiá de Mar. Barcelona).

2000. Inane colaborador del museo geológico del seminario. (Barcelona).

2000. Tiburonera (Barcelona).

2000. Sala Cardenal Carles. (Barcelona).

2008. Proyecto de aula de cultura y naturaleza. (Tiana. Barcelona).



2024. Actualidad de la sala cardenal Carles.


Estoy trabajando en esta entrada.

 


jueves, 23 de febrero de 2023

Haliaeetus leucocephalus, ave rapaz.

 

Haliaeetus leucocephalus ave rapaz. Foto: Antonio Asensi.

¡Hey!

¡Que todavía estoy aquí!

Libre en lo fundamental, pero en negociaciones con el guionista para ajustar algunos detalles.

Esto de la foto, es un pájaro para el vulgo.

Un ave rapaz, para los del meñique tieso.

Y un Haliaeetus leucocephalus, para los quiero y no puedo como un servidor.

Cuando están solas campan a su respeto, pero en compañía de congéneres deben estar controlados porque riñen.

Yo no riño, ni solo ni acompañado.

Cuando estoy solo, leo y cuando estoy acompañado juego al parchís.

Me gusta volar alto y libre.

Pero si las circunstancias lo impiden, vuelo bajo y libre.

Incluso puedo no volar y sigo libre.

No vendería mi primogenitura por un plato de lentejas o un saquito de pasiones.

... Aunque las lentejas me gustan mucho y si tuviera hambre...

...¡no, es muy fuerte! ...¡La libertad me gusta más!



Navegando hacia el Delta del Ebro III. Me dispongo a salir. 40 nudos.

Viene de aquí.

 

Estela navegando a 40 nudos. La barca está planeando.

Bajo los motores a su postura de navegación y los pongo en marcha para asegurarme que todo va bien y para que se calienten un poco antes de salir.

Los chivatos de la refrigeración van perfectamente; tanto el chorrito de aviso. como el pitido, que se silencia.

El ruido que hacen los motores es todo lo perfecto que se puede esperar del sonido de un motor.

Ni humos ni manchas en el agua. Todo bien.

Con parsimonia suelto todas las amarras sin ninguna precaución, pues hace calma chicha. Hace tiempo que he asumido la velocidad del perezoso (Bradypus tridactylus) para moverme.

Con el bichero me separo de la pared de hormigón. Doy avante despacio, cuidando que la popa no golpee el muelle y adiós.

Navego con precaución y despacio para alejarme un poco de la costa.

Nunca había utilizado gps pero ahora lo uso para todo, incluso para costear a un destino conocido, como es el caso.

Mi objetivo es entrar en la gola sur del delta e ir hasta el fondo del saco, hasta el Trabucador y allí fondear a tres metros de profundidad, o a menos si lo veo claro, para dormir tranquilo y estar lo más quieto posible durante el día.

El camino es un paseo pues, aunque en la entrada de la gola hay lugares menos hondos, como calo unos pocos centímetros, tengo que cuidar un mínimo para no llevarme un susto, que sería sólo económico.

Al ser un fondo de arena y lodo, sí los motores embarrancan y cogen barro, debería entretenerme en limpiar todo el circuito de refrigeración y eso es una paliza.

De todas formas, nunca me ha pasado y espero que no me pase ahora.

Cuando llevo un rato de navegación con fondo sobrado y los motores a temperatura adecuada, aprovechando la mar plana y sin viento ni corriente, acelero hasta alcanzar los 40 nudos, que mantengo durante un ratito, pues es muy tenso navegar una barca tan pequeña a tanta velocidad.

Solo quería probar y no me he atrevido a más. Quizá otro día vea si puedo batir esta punta de velocidad, que es aproximadamente de ochenta kilómetros por hora. Tan rápido vas vendido en la mar.

Es la velocidad de un crucero de pasajeros, que no se nota en un gran barco, pero que parece que vuelas en una bañera de unos pocos metros.

No pretendo otra cosa que conocer la barca, pues lo que verdaderamente me apetece es ir despacio y con el menor ruido posible.

Aunque se da la paradoja de que el consumo de los motores fueraborda se multiplica por mucho, cuando van a poca velocidad. Cuando la barca alcanza la velocidad de planeo, es el momento en que la relación velocidad consumo es óptimo. Esa velocidad varía en cada barco, según su diseño y potencia, pero nunca es lenta.

Voy a prepararme algo de comer, que la barriga protesta.

Hoy no hablaré de bichos ni de plantas, que ya me he alargado mucho.

Mi destino es el fondeadero, dejando a la vista, por ahora, San Carlos.

Pero pararé un poco antes para comer algo estando al pairo, ya que el día no sólo lo permite, sino que me lo está pidiendo a gritos.




miércoles, 22 de febrero de 2023

Kalanchoe laxiflora planta crasa, (detalles).

 


Kalanchoe laxiflora, planta crasa (hoja y brotes).
Kalanchoe laxiflora,planta crasa (flor).
Kalanchoe laxifloraplanta crasa, flor y hojas con brotes.

Llevo unos días trabajando con la historia de mis queridos alumnos de jardinería, y no he podido evitar irme al jardín.

Al jardín virtual, con las fotos de mi archivo, de cuando era un mamífero terrestre.

No un híbrido, como ahora.

Es una planta muy prolífica. Para algunos demasiado.





martes, 21 de febrero de 2023

Escuela Taller ruta de las Alpujarras Terque (Almería). I.

 

Botella con mensaje para los alumnos de la escuela taller de Terque.

Si buscas en el buscador del blog, “Alpujarras", te encontrarás con alguna entrada en la que ya hablo sobre esa escuela taller, que dirigí en Terque Almería.

Probablemente, perdido en alguna entrada, haya algún otro comentario.

Quizás parezca demasiado lo que me alargo sobre un tema, que será del interés de pocos. Pero no me importa.

Me dirijo fundamentalmente a mis alumnos de la escuela y no creo que ellos me pongan pegas.

Queridos alumnos de la Escuela Taller Ruta de las Alpujarras.

Me fui sin despedirme, no por falta de ganas, sino porque no me dieron oportunidad de volver.

Me despidieron con cargos falsos de amenazas al presidente socialista del consorcio.

La acusación era tan chusca y falta de pruebas, que el juez dictó a mi favor en una sentencia, que los abogados implicados reconocieron inédita, pues además de darme la razón, hacía apología de mi actividad en la escuela taller, lo que no es común en una sentencia de este tipo.

Lo único que presentó el consorcio para defender su falacia, fue la declaración de un testigo, que era un empleado, ¡que tenía pendiente la renovación del contrato!

La declaración fue tan incongruente y absurda, que no pesó nada en el juicio.

En un detalle de nobleza, el testigo, vino después a pedirme perdón y explicarme que necesitaba el contrato. Lo entendí y le perdoné.

Han pasado muchos años y no creo que con esta declaración le pueda hacer ya daño.

Aprovecho este blog, para despedirme formalmente de mis alumnos de la escuela taller, a los que llevo siempre en el corazón.

 

Puedes continuar con esta historia aquí.


Navegando hacia el Delta del Ebro II. Mocho y cubo.



He estado en Les Cases lo imprescindible para hacer agua y arranchar el barco para ponerlo a son de mar.

No hay mucho que poner y es lo primero qué debo decir en favor de los siempre denostados por mí, barcos de fibra de vidrio y a motor.

Nunca más emitiré un juicio negativo contra ese tipo de embarcaciones.

El tiempo en este puerto no he estado amarrado en pantalán de barcos deportivos, sino a un muelle comercial de cemento.

Resulta un poco desolador pero entrañable.

Eso no se debe hacer, pero físicamente se puede, si estás ojo avizor y hasta que alguien te eche.

Cuando llegué, un grupo de chavales jugaba al fútbol sobre el suelo cubierto de suciedad y restos de acarreos, que forman una arenilla grisácea.

Este material con base de grasa, se pega a las suelas de los zapatos y luego, cuando subes al barco, vas dejando las huellas perfectamente delimitadas.

He descubierto que la forma más eficaz, aunque poco elegante, de quitar esas huellas, es con un mocho y un cubo con agua jabonosa.

Se ahorra mucha agua y tiempo.

Después de darle un repaso a toda la cubierta a la manera marujil, se llena otra vez el cubo con agua limpia que se va esturreando sobre la cubierta, con cuidado y precisión, para que arrastre todo lo arrastrable.

Un tercer cubo, para escanciarlo con un recipiente más pequeño en los rincones más inaccesibles.

Tres cubos de agua y unos minutos y el barco quedan más bonito que un San Luis.

Me he ido con ochenta litros de agua en el depósito. Las baterías las tengo siempre cargadas, con la energía que suministran los motores fueraborda.

Algo de comercio y bebercio para hacerme más agradable la navegación y ya está todo listo.


Si navegara a vela debería haber preparado un sinfín de pertrechos.

Pero no aquí. Es un visto y no visto.

Las escalas son muy cortas y además hay puertos cada nada.

Mi autonomía es de cien millas y la velocidad de crucero 20 nudos (la máxima que he contrastado, es de 40 nudos).

Me ha costado cinco años cambiar el chip de la vela al motor y ya casi está, aunque no del todo...

Son las siete de la mañana y la mar está como una balsa de aceite.

No hace viento, el cielo está gris pero no amenazador y el pronóstico es que, en los próximos días, más de lo mismo.

Queda un poco de invierno, que lo voy a pasar en el Delta del Ebro, aquí a la esquina.

Fondearé a resguardo del delta y me suministraré en San Carlos de la Rápita, cuando sea imprescindible.

Así, hasta que me aburra.


lunes, 20 de febrero de 2023

Coral blando tropical, (Gorgonia mariae).

 

Coral blando tropical, gorgonia abanico, (Gorgonia mariae).

La fotografía, puede ser de un ejemplar del Caribe, naturalizado hace varias décadas.


Existen de varios colores. Esta, obviamente, es la variedad amarilla.

Si escribes en el buscador del blog "Gorgonia", encontrarás más información sobre este animal colonial.

Navegando hacia el Delta del Ebro I. Las Casas de Alcanar.

 

Les Cases. Muelle de hormigón.

José María nos ha dejado. Ha bajado a las catacumbas.

No sé si allí tendrá Wi-Fi, pero no necesito de la tecnología para estar con él:

¡Hola soy Pepe, su otro yoMe ha dejado la barca en el puerto de las casas de Alcanar, para que tenga un techo.

Ya me he instalado en mi nueva casa.

Preferiría un velero, pero a caballo regalado no le mires el dentado. Y además el motor me da más maniobrabilidad, operatividad y menos trabajo, lo que va a son de mi tiempo.

Cierto que la gasolina supone un coste adicional, pero es el chocolate del loro para mi plan de navegación, que es más sedentario que activo.

El coste del amarre es inevitable, pero me lo tomo como un alquiler modoso.

domingo, 19 de febrero de 2023

Nuevos tiempos.

Amanece para buenos y malos... Que el manto azul de María nos arrope cuando llueva o haga frío. 

Antes de seguir, podrías visitar este enlace.

José María nos ha dejado. Ha bajado a las catacumbas.

No sé si allí tendrá wi-fi, pero no necesito de la tecnología para estar con él:

¡Hola soy Pepe, su otro yoMe ha dejado la barca en el puerto de las casas de Alcanar, para que tenga un techo.

Por lo demás, todo queda igual.

No me voy a sentar en su silla, que es rancia e incómoda.

Sólo voy a seguir con esto.


 


sábado, 18 de febrero de 2023

Yedra, (Hedera iberica ) y (Hedera algeriensis) y parra virgen, (Parthenocissus tricuspidata).

Hay muchas variedades de yedra o hiedra, pues los botánicos y jardineros se ocupan en hibridar esta planta tan estética y útil.

Aquí traigo un par de ellas, una más rústica y otra más sofisticada.

También traigo una parra, que, por su hábito trepador, puede confundirse con una yedra. Pero no son de la misma familia, e incluso diría que ni parientes próximos… Bueno, en la naturaleza, todo es próximo.

Algunos de los ejemplares que he fotografiado, crecen cerca de un convento de carmelitas descalzas, por lo que aprovecho para dedicar esta entrada al señor Domenech, seglar culto especialista en el Apocalipsis, entre otros asuntos de carácter profesional y humanístico. 


Yedra, (Hedera iberica ).
Yedra, (Hedera iberica ).

Parra, (Parthenocissus tricuspidata) en primavera.

Parra, (Parthenocissus tricuspidata) ausente en invierno.

Parra, (Parthenocissus tricuspidata) hojas y frutos.


Parra, (Parthenocissus tricuspidata).


Yedra, (Hedera algeriensis).


miércoles, 15 de febrero de 2023

Has de leer más.

 


Aplícate a la lectura, es sano y satisfactorio.

Ya sé que Internet contiene abundante información, pero mucha de esa información no está firmada y cualquier aportación anónima es sospechosa. No sospechosa de criminal, sino sospechosa de no ser fiel a la realidad.

Un libro viene firmado, es decir, avalado por una persona de la que normalmente se incluye algún dato curricular relacionado con el contenido del libro.

Si no es un libro de autoedición, ha tenido que pasar unos controles externos y al suponer una inversión grande, el editor se habrá asegurado que de que el contenido sea bueno.

Me estoy refiriendo a libros de ciencias naturales.

En los libros de filosofía o pensamiento político, el asunto es otro cantar.

Internet lo utilizo fundamentalmente, en lo que a ciencias naturales se refiere, para aproximar una clasificación. Pero hasta ahí se puede llegar.

Sin embargo, eso es como salir a pasear a un parque, que está delimitado por una valla y sabes lo que te puedes encontrar.

Si vas al monte el horizonte es infinito. Internet es el parque y los libros son el monte.

Naturalmente esto es una metáfora, pues Internet contiene muchísima documentación, lo que ocurre es que has de saber buscarla y a veces eso no es fácil y muchas veces llegas a lugares interesantes, en los que has de pagar para acceder a la información.

En lo que a mí respecta, prefiero pagar por un libro que por un documento de Internet.

Me dirás; pero tú ofreces libros aquí, en Internet.

Si, efectivamente, pero como habrás podido observar he pasado de los libros en papel, que me gustan más pero que resultan muy caros, a los libros en formato digital, que me gustan menos, pero que resultan prácticamente regalados.

Simplemente están sujetos a una tarifa limitativa de uso, que se llama en economía, y que, en este caso es simbólica y además la puedes determinar tú mismo.

Para no comprometer ni al lector ni a la ciencia, lo que hago en mis libros de naturaleza, es mostrar imágenes que suelen ser escasas en  Internet y que sirven para ilustrar también otros textos que puedas encontrar.

Además y muy importante, procuro identificar lo que ves en mis fotos, cosa que no es frecuente en internet.

Muchas de las imágenes que ofrezco en mis libros o en este blog, van a llenar huecos de imágenes que no se encuentran con solvencia en Internet.

En definitiva, te recomiendo que leas más y no solo de ciencias naturales, sino de todo lo que te venga a la mano y tenga unas ciertas garantías de no fundirte el cerebro.

En el blog te he presentado algunos títulos, que a veces he comentado por encima. No era mi intención hacer publicidad gratuita de ellos, como tengo por errada costumbre.

Ya veremos en el futuro, si lo hay.


Pero no debes ignorar este consejo:

Una advertencia más, hijo mío: multiplicar los libros es una cosa interminable y estudiar demasiado deja el cuerpo exhausto. (Atribuido al rey sabio, Salomón).




Enlace al libro ...Trilobites.


martes, 14 de febrero de 2023

Margarita africana.

Margarita africana.

Te comenté en su día, que no iba a hablar de híbridos de jardinería, pero, ¿quién se puede resistir a semejante belleza?

Su nombre común es margarita africana, por su procedencia, y he encontrado dos géneros africanos que me cuadran con esta foto, que saqué en un jardín de la vertiente norte de la sierra litoral catalana. Se trata de Dimorphotheca pluvialis y Arctotis venusta.

Te dejo que investigues, a ver si puedes identificar a cuál de los dos géneros debemos apuntar.

Creo que el segundo… ¿te parece acertado?

 

domingo, 12 de febrero de 2023

Aborto y especie.

 

Bosque creciendo. Foto: Angélica Regidor.

Voy a volver a hacer amigos…

Lo que algunos miopes llaman justicia en España, acaba de avalar la ley Zapatero sobre el aborto.

Para no dar la tabarra sobre esta ley de sobras conocida, resumiré pronto y mal lo que el tribunal constitucional español ha avalado; la sociedad va a poder seguir matando seres humanos de forma planificada e impune.

En principio a mí me tendría que dar lo mismo porque ya estoy crecidito y esa ley no me afecta personalmente.

Lo que me debería importar, es la ley de la eutanasia.

Pero me sigue importando el aborto por dos motivos muy importantes y absolutamente ajenos a las ideologías políticas y a los credos religiosos.

El primer motivo es que las personas a las que se aborta son colegas de especie y soy un animal social y por lo tanto solidario y empático.

Y como animal social defiendo a mi especie por mero instinto.

Como animal social racional, también la defiendo por razones de mucho peso, además de la del instinto.

No voy a entrar en las monsergas de las semanas de vida del feto, porque la ciencia tiene más que sobradamente demostrado, que desde el momento de la concepción hay ser humano.

Sólo los tontos del bote, algunos políticos y los malvados, niegan esa premisa que es objetiva, científica y del más elemental sentido común.

Por eso estoy en contra de esta sociedad de descastados, que está atentando contra mi especie.

La segunda razón es más egoísta.

Cuando una inmundicia se practica con asiduidad, acaba por no dar asco y se llega incluso a encontrar placer en hacerla.

Eso es muy peligroso porque supone dar un paso para colocarse en el plano inclinado de la decadencia.

Como todos sabemos, cuando algo se desliza por un plano inclinado, va acelerándose y acaba perdiendo el control.

Se empieza asesinando a personas a las que no se oye gritar mientras que se las mata, y se acaba matando por el placer de matar. Nerón el psicópata, es un buen ejemplo de ello.

Toda nuestra especie, al margen de ideología o credo, debería estar clamando en contra de este genocidio que nos está diezmando.

Y debería estar luchando activamente contra los asesinos.

Todos con la pluma y la opinión y los no cristianos, también con la espada.

Creo que los cristianos están exonerados moralmente de este último aspecto, por sus creencias sobre la vida.

Aunque les sugeriría que leyeran a san Bernardo de Claraval en su carta fundacional de los templarios, para ver si es lícito empuñar la espada para defender al semejante.

Sé que con esta entrada voy a alejar a los lectores de izquierdas y los de derechas seguirán sin leerme.

Es decir, que tiro piedras sobre mi tejado.

Pero París bien vale una misa.

Y mi tejado me trae al fresco.