La Amaryllis sp. de la vecina.

 

Amaryllis sp. Foto: Angélica Regidor.

Ya sé que dije que no sería prolijo en traer a este Blog flores que fueran híbridos de jardinería.

Esta flor de origen sudafricano es una excepción, pues la flor no es el motivo de la entrada.

El motivo es el detalle que tuvo una vecina, de plantar los bulbos en el ajado jardín de la casa.

Las flores duraron unos pocos días en su esplendor, para luego perder su porte y dejar sólo el recuerdo, hasta que en su tiempo vuelvan a brotar.

Ya veremos.

Por lo pronto, hoy mismo, unos niños jugaban con su perro sobre ellas.

Recuerdo la obsesión que tenían en Andalucía por pavimentar jardines y patios, porque así eran más cómodos de mantener.

Y la manía que también tenían de talar árboles porque éstos utilizaban los recursos agrícolas…, aunque no hubiera cultivos cercanos.

Era simplemente el San Benito de que un árbol se comía el alimento de las tomateras y de las habas.

Es difícil rodearse de personas, más fácil de individuos.