No vamos a entrar aquí, en el detalle de los
hermosos diseños de las conchas de muchos moluscos.
Lo cierto es que los dibujos y coloridos de esas conchas son espectaculares, hasta el punto de que a muchas de ellas las han llevado a la extinción.
Extinción no por causas naturales, sino por la acción
directa del hombre, que atraído por su belleza, desde la más remota antigüedad,
las han utilizado como monedas o simplemente como elementos coleccionables y de
ornato.
Paralelamente, en el mundo humano, en muchas
ocasiones la belleza hace a los individuos idiotas y por tanto vulnerables.
Cuando la inteligencia se comparte con la belleza,
se alcanza un alto grado de perfección.
Los moluscos no tienen inteligencia, pero sí una gran capacidad natural de adaptación al medio, lo que muchos casos hace que sobrevivan.
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