Cobre nativo. |
Arriba, cobre nativo. 61 mm. Arizona. (EE.UU.).
Abajo, cobre nativo, lago
Michigan (EE.UU.).
Estas formaciones tan vistosas de cobre nativo que encontramos en los comercios, han sido limpiadas por electrólisis.
Cobre nativo. |
Cien mil vistas. |
Imagino que, por una cuestión psicológica, me había
puesto cien mil, como un número de vistas decente para el blog.
He llegado a las cien mil vistas y no siento nada.
¡Qué decepción! ¡Igual que el fin de año!
¡Tanta
fiesta para que no cambie nada!
El único plazo que me da verdadera satisfacción, es
el de prescripción de las declaraciones de la renta.
Bueno ya tengo cien mil vistas. ¿Y ahora qué hago?
¿Esperar a las doscientas mil?
¡Pues qué aburrido!
Quienes me quieren consolar, me dicen; ¿pero tú lo
haces porque te gusta, no?
Pues sí.
Si no, sería masoquista.
Pero no me gusta trabajar sin objetivos y el próximo
razonable sería 200.000 vistas.
Y eso es una pasada si no hay otro aliciente.
Un tema que da mucho de sí, es la política.
Podría hablar de lo animales que son los políticos.
Pero me parece un feo para los animales.
También está cada vez de más de moda lo de la comida
con hierbajos y bichos.
Pero es una moda peligrosa.
Porque hay mucha gente que se cree que puede llegar
a ser autosuficiente...
Como la que se compra un coche eléctrico o pone
placas solares en su casa.
Esta creencia, normalmente va asociada a la conspiranoia
y no quiero ayudar a encarecer más la seguridad social.
En fin, que se me presenta un futuro aburrido, a
corto y medio plazo.
Porque a largo plazo, todos calvos.
Seguiré hasta que se me ocurra algo.
... Aunque tal como tengo el terrado, dudo que se me
ocurra nada.
O esperaré a que surja algo nuevo.
... Aunque tal como está el panorama, quizás vale más que
me quede como estoy.
En última instancia, siempre me queda el consuelo,
de que menos da una piedra.
De cualquier manera, esta cifra de vistas, es más
que suficiente como para enfrentarme a los 100.000 hijos gabachos de san Luis y
devolver la libertad nunca perdida del blog.
Hogaza de pan ruso. |
Angélica conoce a una chica rusa que se llama Olga, que hace pan por afición culinaria.
Habrá muchas chicas rusas que se llamen Olga, pero
menos que hagan pan.
Y si el pan que hace no es típico ruso, serán menos
las que hagan este pan.
Pan con harina blanca, harina de centeno, harina
integral y masa madre.
Te traigo una foto porque es un pan poco atractivo para
nuestros ojos acostumbrados al pan blanco.
Bueno, ahora menos, porque en las panaderías venden
mil clases de pan.
Pero a la mayoría, que hemos crecido viendo solo pan
blanco, no nos resulta familiar.
Me preguntarás, ¿Es bueno ese pan tan oscuro?
Bueno, de bueno para el cuerpo, sin duda debe serlo,
porque lleva muchos condimentos y todos ellos buenos.
Otra pregunta, es si está rico ese pan.
Ahí ya entra la subjetividad en la respuesta.
Para mi veterano paladar acostumbrado al pan blanco,
prefiero el pan tradicional Mediterráneo.
Alimenta menos porque es solo a base de trigo, pero
deja más margen al resto de sabores con los que se combina el pan.
Sobre todo si son sabores sutiles.
Este pan tan rico en condimentos, ofusca otros
sabores con el suyo propio.
Pero tiene un encanto exótico que lo hace muy
apetecible.
Me gusta untarlo y se unta bien porque es
consistente.
El sabor es agradable, pero hay que aprender a conocerlo y hacerse con él.
A mí me ha llevado poco tiempo.
Lo hace una rusa, pero no sé si es un pan típico
ruso.
Quizás lo sea porque es un pan muy contundente y en
Rusia hace más frío que aquí.
Pero eso no debe engañarnos, porque en los países
nórdicos se comen más helados que en el sur.
Crisol de fundición de las minas de oro de Rodalquilar (Almería). |
No hace falta que te explique las consecuencias de
vivir hacinados en bloques de pisos donde unos vecinos defecan encima de otros.
El amontonamiento de la población produce mil
tensiones de todo género.
No es sano ni saludable, tanto física como
psicológicamente.
Sin llegar a la fastuosidad de los pueblos
norteamericanos que vemos por la televisión, se puede alcanzar un término medio, si se quita la intermediación patológicamente golosa del
político, por el dinero.
Se trata de crecer a lo ancho en lugar de a lo alto.
El dinero no es de todos, como decía la infame
ministra socialista.
Pero la tierra sí que es de todos.
O debería serlo.
Los gobiernos y los ayuntamientos, en lugar de dar a
cualquiera, subvenciones indiscriminadas a fondo perdido, deberían dar un
espacio de terreno para construir una casita y plantar un huerto, para que se
instalarán familias con afán de trabajar y producir.
Podrían ser concesiones a un tiempo determinado.
No es esto tan raro, pues desde hace muchos años el estado
da concesiones a cincuenta años a empresas para que construyan puertos deportivos
y alquilen sus amarres.
Eso es lo mismo dar concesiones temporales de
tierras a familias, para que construyan su casa y un huerto para el autoconsumo
y realización personal.
Lo del huerto ya lo hace muchos ayuntamientos, pero
ninguno tiene el valor de dar una concesión de terreno para construir una casa
unifamiliar y comprometerse a cuidar de ella en buen estado.
No tengo más datos, pero en el pueblo minero abandonado
de Rodalquilar, en Almería, cedían antiguas casas de mineros, a cambio de que
se restauraran, se creara un jardín y se plantara en él, como mínimo, un árbol.
Hace algo más de cuarenta años que hubo esta
iniciativa y harás bien poniendo en duda mi memoria
Pero lo que digo no es una fantasía exótica, sino
una realidad práctica.
El único impedimento que existe, es la avidez de los
partidos políticos y de sus dirigentes por sacar dinero hasta de las piedras.
Se trata de que cada casa tenga su huerto o jardín,
su aljibe y viva el ritmo diario de la luz.
Las placas solares para electricidad, son un camelo
muy contaminante y caro que se suple muy fácilmente con la toma a la red
general.
Y lo que sí es práctico y rentable, es calentar el
agua con paneles solares y aislar muy bien las construcciones.
La tecnología moderna ofrece soluciones muy
económicas, efectivas y poco contaminantes.
Tengo buenas razones para haber planteado esto con
cuatro pinceladas, que cualquier mente puede desarrollar, utilizando un mínimo
sentido común.
Con esto saldrían poblaciones muy extensas, pero hoy
el transporte personal está solucionado de mil formas efectivas, procurando
siempre evitar el uso de baterías.
Hay que recordar siempre, que una semana de un
volcán en erupción, produce más cantidad de CO2, que todo el parque móvil desde
la revolución industrial.
Hay que pensar utilizando nuestras cabezas, no las
cabezas de quienes nos explotan.
¿A qué cretino se le ocurre seguir los consejos de
consumo, que salen de la sesera de alguien que utiliza un avión a reacción para
ir con sus amigotes al cine, con dinero de los impuestos?
Casa unifamiliar prefabricada. |
Casa unifamiliar en contenedor. |
Tiana (Barcelona) romana. |
No busco una sociedad ideal, porque no soy un iluso.
Pero lo que tenemos es tan malo y está tan mal
distribuido, que, sin necesidad de buscar una sociedad ideal, se pueden
encontrar muchas sociedades intermedias, mejores que la que hoy tenemos.
Para mí loca divagación, lo primero que he de hacer
es prescindir de la situación en la que vivo.
Para ello, debo recluirme en mi celda, cerrar la
puerta y hacer oídos sordos a lo que pasa fuera.
No se trata de ignorar las voces de auxilio, si no
de hacer que el ruido inútil quede fuera de mis frecuencias audibles.
Con ello ya habré ganado mucho.
Pero me queda lo principal, que es organizar las
ideas que de forma caótica me invaden el cerebro.
Procuraré empezar por el principio, que es lo más
elemental y coherente.
Vivo en una población dormitorio de Barcelona, que
hace apenas diez años era un paraíso de paz.
Lo venía siendo desde la época romana, en la que las
tierras por su fertilidad daban gozo y el clima era saludable y benigno.
Lo siguen siendo.
Entonces, se daban como premio a los soldados romanos
destacados.
Se formó una comunidad de los mejores.
Pero ha transcurrido el suficiente tiempo como para
que los sucesivos consistorios, que han ido peleando a degüello unos contra
otros, hayan tenido una causa común: Que es la de enriquecerse a través de las
recalificaciones de terrenos y las concesiones, a veces turbias, para la
construcción.
Eso es de libro.
Ha sido y es, una forma directa y desvergonzada de
enriquecer a los partidos políticos y a la vez una forma indirecta y
desvergonzada de enriquecer a sus protagonistas.
El suelo dedicado a tareas agrícolas ha desaparecido
prácticamente y es todo el suelo urbanizable, allanando incluso taludes de la
montaña, que es parque natural, para hacer parcelas edificables.
La paz y el sosiego de este entorno ha desaparecido
como han desaparecido árboles y fauna.
Iba a más, hasta que los bloques de casas, no pueden
cumplir las elementales y mínimas normativas de distancia entre edificios.
Por fuerzas sociales que desconozco y me asombran positivamente,
el ayuntamiento ha cedido a particulares algunas parcelas simbólicas para que
tengan sus propios huertos.
Creo que esos huertos tienen menos futuro que un
caramelo en la puerta de un colegio.
Esa política alocada de construir viviendas, ha
proporcionado techos a familias que los necesitaban.
Naturalmente a familias con la suficiente capacidad
económica para comprar pisos que se ofrecen a precio de oro, a causa del precio
del suelo.
Pero ha sido una compra envenenada, porque el
entorno al que han ido a parar esas familias, es de tal naturaleza, que no es
posible la convivencia social que Homo sapiens necesita, ni el contacto
con la naturaleza.
Porque la necesidad de contacto entre seres humanos
de nuestra época, es la necesidad de siempre, con las características
específicas que cada época ha tenido.
Homo sapiens necesita relacionarse en
espacios abiertos con horizontes diáfanos y naturaleza presente.
No se trata de; hasta donde alcanza la vista es
mío. En absoluto.
Se trata de tener espacios comunes amplios, naturales
y limpios, donde los niños puedan corretear y jugar y los mayores puedan
sentarse a contarse sus batallitas.
Todo eso que parecen tonterías, son lo que da
coherencia a una sociedad moderna o antigua, de una ideología o de otra,
siempre que esas ideologías estén regidas por esa tenue y generosa ley natural.
No es difícil ni técnica ni políticamente, crear un
ámbito de convivencia humana con las características que he esbozado.
Hoy hay tecnología y medios más que suficientes,
para crear ese ambiente.
Siempre los ha habido en la medida de cada época.
Pero lo que no hay hoy es voluntad de crear ese
ambiente.
En otras épocas tampoco ha habido esa voluntad, pero
entonces no se creía en la igualdad de los hombres, con lo que quedaba disimulado
ese factor egoísta, que hace que las normas dibujen un paisaje tan estéril e
inhumano como el de hoy.
Hasta hace dos mil años en que el cristianismo
extendió la idea en que todos los hombres somos iguales en dignidad, se
aceptaba que hubiera pobres y leyes para ricos y leyes diferenciadas para unos
y otros.
Pero esa idea de igualdad tan sugestiva, se extendió
como un reguero de pólvora por todo el mundo civilizado.
Y hoy dos mil años después volvemos a separar al
pobre del rico haciendo leyes para unos y para otros.
Esa discriminación dibuja la sociedad en la que
vivimos, una sociedad, hedonista estrafalaria e injusta.
¿Es esta una consecuencia ineludible del desarrollo
de la tecnología y del aumento de la población?
No. Sin duda, no.
La tecnología no solo no es un potenciador del
desastre de sociedad que se está formando, sino que es un coadyuvante para
vivir una sociedad más integrada en la naturaleza.
Y el incremento de la población no solo no provoca
problemas de empleo y alimentación, sino que es un regalo de la naturaleza para
mantener y actualizar un genoma que corre el riesgo de envejecer y quedar anquilosado.
Cada ser que nace lo hace con disposiciones
intelectuales superiores a las de sus ancestros.
Es esa una riqueza genética que no se puede
despreciar porque en ella está la clave del futuro del Homo sapiens.
De cómo podemos ir encauzando desde hoy mismo ese
futuro en que hombre y naturaleza sigan de la mano, lo esbozaremos otro día.
Que por hoy ya he dicho mucho y he ordenar mis
pobres ideas.
Viborera marítima (Echium sabúlica). |
Viborera marítima (Echium sabúlica). |
Es esta una planta medicinal que sirve para mucho,
con el único inconveniente de que es tóxica para el hombre y para los animales.
¡Pues menudo negocio, me dirás!
Efectivamente. Ya lo he comentado en otros lugares
del blog en los que he hablado de insectos o plantas que tienen propiedades en
principio útiles para un hombre.
Pero en la viborera, como en estos otros ejemplos que
te cito, sin citar su toxicidad, ésta es en función de la cantidad y concentración
de lo que consumas.
La viborera contiene principios tóxicos, pero en
cantidad muy pequeña, de manera que para hacer verdaderamente daño a un hombre
hay que tomar mucha.
Sin embargo, mamíferos grandes han muerto por el
consumo de viborera.
Por ejemplo, las infusiones de viborera son buenas
para afecciones bronquiales, pero es mejor y más seguro tomar un buen jarabe
prescrito por un buen facultativo.
En un país pobre en el que no haya ni jarabes ni
facultativos, la tradición popular conoce por experiencia las dosis adecuadas
para confeccionar una pócima que resuelva algún problema concreto, en ese caso la tos, por ejemplo.
Pero arriesgarse en pasarse de dosis por jugar a
supervivencia, es de bobos.
He hablado aquí de muchas plantas medicinales y
tóxicas en las que no he querido entrar en detalles precisamente por eso, porque
el uso tradicional de la planta cuenta con el conocimiento y la experiencia
que no se adquieren leyendo en un blog, cuatro lugares comunes sobre ello.
Por eso siempre soy cauto al hablar de estos temas, porque prefiero no llevar a nadie a la confusión, que atraer audiencia con
contenidos espectaculares.
Aquí puedo dar información y conocimiento, pero no
experiencia, que es algo que va unido a una vida de estudio y práctica.
Hay libros magníficos sobre estos temas, pero si
realmente quieres saber, busca un buen maestro que te acepte y acompáñale en sus
experiencias de campo.
Y aquí acabo.
La viborera marítima me ha servido
para darte un consejo más útil que la propia planta.
Aquí puedo dar información y conocimiento, pero no experiencia, que es algo que va unido a una vida de estudio y práctica.
Hay libros magníficos sobre estos temas, pero si
realmente quieres saber busca un buen maestro que te acepte y acompáñale en sus
experiencias de campo.
Viborera marítima Echium sabulicola, manchas características.
Falso pimentero (Schinus molle). |
El falso pimentero es otro ejemplo de planta con
propiedades medicinales, pero que tiene principios tóxicos.
Es decir que tomadas en cantidad pueden causar más
perjuicios que beneficios.
Reitero lo que comenté en viborera.
Las plantas que tienen principios realmente
beneficiosos, ya las utiliza la medicina en proporciones adecuadas para que
actúen como deben para bien.
Parece que soy paladín de la industria farmacéutica.
Nada más lejos de mi intención y en cualquier caso, mi voz es
inaudible entre el griterío que está en contra de ellas.
Hablo movido por el sentido común y para evitar esa
corriente de naturismo basado en la ignorancia y ajeno a la experiencia.
Hay personas que se diagnostican utilizando Internet
y conforme a ese diagnóstico se medican.
Si lo miras desde esa perspectiva verás que no soy
paladín de nada, sino una voz que clama por la sensatez.
Lagartija gótica. Foto: Angélica Regidor.
En esta entrada, has de trabajar tú.
Porque no sé qué decir.
Fue una inspiración, un chispazo… y se acabó todo en
el consciente.
Pero sin duda, algo habría en el subconsciente.
O no habría nada.
O habría demasiado.
Quizás debería haber titulado la entrada, sin
palabras.
Pero no podía. ¡Soy tan locuaz!
Un desayuno frugal... más o menos. |
No suelo desayunar.
Dicen que es la comida más importante del día.
Dicen muchas cosas y las contrarias.
Normalmente el cuerpo no me pide desayunar y creo
que todas las comidas son importantes por igual, sean comidas o picoteos.
Lo importante es comer cuando se tiene hambre y
comer poco de cada vez.
Y desde luego comer siempre con moderación. Una
buena medida es levantarse de la mesa antes de ver saciado completamente el
apetito.
Creo que es mejor descansar antes de comer que dormir
la siesta.
O mejor, hacer las dos cosas.
No me sirve la excusa de lo agobiado del tiempo
moderno.
Digo descansar antes de comer y dormir la siesta,
que puede ser media hora.
Es mi parecer, que no va a misa. Solo es un parecer.
Tengo argumentos para afirmar esto, pero no vienen
al caso pues nos iríamos muy lejos.
No soy un dietista. Estoy tan alejado de los dietistas como de los ecologistas.
Aunque no lo parezca, pues es por cuestiones de matiz.
Mis años de vegetariano no lo fueron para cuidar la
dieta, sino como testimonio de la defensa de los animales.
El vegetarianismo por esos motivos, es algo que todos
deberían probar.
Cómo hacer la mili de antes. A muchos desemborricaba y les daba una visión realista de la vida.
Con el tiempo he visto cuán sabio es
el ejército, pues enseguida vieron, con una simple revisión médica, que era un inútil total e incluso me lo dijeron por escrito. Naturalmente
no hice la mili porque total significa para todo.
Al principio no me lo creí, pero luego he visto que tenían razón: Desde siempre he sido un inútil total.
Lo que me sorprende es que
luego la sociedad me haya querido para algo.
Con el vegetarianismo pasa lo mismo; una práctica temporal te abre los ojos y te deja ver que si eres gordo o fofo es porque quieres.
Y también que matar animales para el consumo humano puede llegar a
justificarse, pero que es injustificable el trato que muchas veces se les da
antes y durante el sacrificio.
Pero no me hagas mucho caso, porque a veces chocheo. Arriba te he puesto la fotografía de un desayuno, en un día cualquiera de los
que sí desayuno.
Te podría haber puesto también un plato de nata montada, que me tomo a veces con una bebida de chocolate muy popular en Barcelona.
Es una costumbre que adquirí en mis años mozos rondando las granjas
del casco antiguo de Barcelona, en los aledaños de la Iglesia del Pino, con mis compañeros de montaña.
Cuando practicaba alta montaña, escalaba y hacía espeleología, a pesar de ser, oficialmente y con certificado, un inútil total.
Y es que la vida, además de vivirla intensamente,
hay que vivirla peligrosamente. Dentro de un orden, claro.
Golondrina. Este es el modelo sobre el que monté el taller escuela. Foto: Internet. |
Golondrina, puerto Barcelona. Puerta de la paz y monumento a Colón. |
Cuando nos dieron el chasco de desahuciarnos del local pequeño de la estación marítima de Mallorca, me encontré compuesto y sin novia.
Había qué hacer algo y gracias a la relación que tenía con el propietario de la empresa de las golondrinas, conseguí que me dejaran una de ellas para instalar una exposición que sirviera de tránsito hasta que volviera a funcionar Barcelona i la mar (Barcelona y la mar).
Las vitrinas que utilicé fueron las mismas de la
sala pequeña de la estación marítima de Mallorca.
Eran unas vitrinas recicladas que me había regalado
la caja de ahorros y monte de piedad de Barcelona por intermediación de Jordi
Ardid, una excelente persona, que ya descansa en paz, tras una muerte
prematura. Me impresionó mucho el día que me comunicaron su muerte. Todavía lo
recuerdo con mucho afecto. No supe reaccionar cuando me dieron la noticia y no
he querido conocer detalles, pues me parece morboso. Ya no está y listo. Me
queda en el recuerdo la que fue una persona con la que sintonizaba totalmente y
a la que apreciaba sinceramente
Volviendo a la exposición en las golondrinas creo
que duró un curso escolar y luego me cedieron el local grande de la estación
marítima de Mallorca.
Tengo que verificar fechas, pero creo que ese es el
orden correcto.
La exposición fue un éxito por lo original.
Luego las golondrinas se han modernizado mucho y ya
hacen salidas fuera del puerto de Barcelona. En la época en la que me refiero
el recorrido era todo interno.
Recuerdo con efecto al dueño de la empresa que me
parecía una persona excelente.
Pero cuando decidí romper con mi pasada y marcharme
al desierto lo hice con todas sus consecuencias.
A veces me dan amagos como de arrepentirme, pero
enseguida reacciono y creo que tendría que haberme ido más lejos, a Mongolia,
como era mi intención inicial y de donde obtuve alguna información a través de
nativos en España. Pero las circunstancias familiares no me permitieron
perderme tan lejos.
Visto con la perspectiva del tiempo creo que me
equivoqué
He querido dar solo unas pinceladas de las
golondrinas y se encuentra más documentación hurgando por los archivos la
subiré aquí.
Quiero acabar con un dato para la historia.
Los locales que ocupé en los espacios de la antigua estación
marítima de Mallorca, estaban prácticamente nuevos y a mi modesto modo de ver
podían cumplir su función perfectamente.
Pero de repente alguien pensó en construir el
edificio del World Trade Center y aplanó todo el muelle para
construirlo.
Claro que entendí esa operación, pero no me gustó.
Me pareció lo que no quiero decir, porque he
decidido amansar el blog y vivir en paz.
He visto lo suficiente como para añorar muchas cosas
que hacían nuestro mundo más tranquilo y más feliz.
Los años que vivía en el desierto de Almería sin
teléfono, sin televisión y apenas con radio, creo que puedo decir que fueron
los años en los que sentí más la vida.
Quizá pasaban las mismas cosas malas que hoy pero no
me enteraba.
Hoy tampoco me entero porque como ya he dicho en el
blog no me conecto con los medios.
Pero aun sabiendo lo poco que sabía entonces de la sociedad y de sus miserias, no vivo tan tranquilo.
Golondrina moderna. La foto la tomé cuando bordeaba una una regata. Poca gracia les tubo que hacer a los regatistas, pero debió ser un espectáculo para los clientes. |
Solemos saber cuándo empiezan las cosas.
Quizás, si son muy antiguas, no tengamos más que una
fecha aproximada.
Pero no sabemos cuándo acaban.
Se cuando empecé este blog, pero no sé cuándo lo
acabaré o cuando me lo acabarán.
Puede que el blog me sobreviva, pero por ahora no
tengo discípulo para ese menester.
Por eso, como llevas unos años conociéndome, me
parece inadecuado no despedirme cuando deje esto.
Pero claro, como no sé cuándo lo voy a dejar, me he
planteado dejarte una despedida preventiva.
Y para que no quede raro y no desconcierte a las
nuevas visitas que pudieran haber y caso de que siga subiendo entradas una vez ya
me haya despedido, he pensado colocar esto perdido entre las entradas del blog,
de forma que nadie lo encuentre, salvo que por casualidad se tope con él.
Y a la vez de poner un gadget que anuncie el fin, de
manera que el día que deje esto y no pueda despedirme en este momento, el
visitante pueda ir al gadget y encontrar esta despedida preventiva.
No sé si me he explicado bien, pero creo que lo
habrás entendido y habrás visto que es ingenioso.
El objeto es no faltar a la elemental educación y no
irme a la francesa.
La despedida va a ser corta.
Como no te conozco, no puedo decir que ha sido un
placer compartir esta andadura contigo.
Sí puedo decir que te agradezco tu o tus visitas,
que han engrosado el contador.
Como mi actividad es puramente filantrópica, ese
engrosamiento solo ha servido para satisfacer mi ego.
Pero como mi ego es ridículamente pequeño, ha
servido para poco.
El objeto del blog era distraer y acompañar a
personas solitarias o enfermas y creo que, aunque sea en poco, algo ha hecho.
Es el equivalente a un libro de mil páginas.
Más o menos.
También tenía por objetivo transmitir a mis deudos
una experiencia de vida.
Pero eso ya lo doy por fracasado, porque mis deudos
me han dicho que cuando les deje, no leerán nada porque les pondría muy tristes.
¿No te fastidia mayo con sus flores?
Pues nada. ¡Ala y adiós!
Cuando me aburra y pueda, iré poniendo fotos para
que el cacoso buscador de imágenes de Google tenga más carnaza.
Y colocaré comentarios personales, para que quien
entre con asco pueda ignorarlos y así hacerme un desprecio.
Que pienso en todos, amigos y enemigos.
Hasta la vista, no sé cómo ni cuándo.
Recuerda que para el espíritu no rige el espacio y
el tiempo, que son propiedades de la materia y nuestra materia pronto será
alimento de hongos, que luego se los comerán unos turistas en un restaurante
italiano, salteando un arroz.