Páginas

viernes, 9 de diciembre de 2022

Es para ciscarse.

 


A pesar de su número de visitas, creo que este blog no sirve para una puñetera cosa.

No porque no contenga abundante material de indiscutible calidad técnica y a veces incluso científica, sino porque todavía no ha nacido el lector al que va dirigido.

Ni a mí me interesa demasiado.

Quizá porque como lo escribo, ya sé lo que dice, y pierde el interés de la sorpresa.

Por eso a partir de ahora voy a intentar entretenerme un poco más a mí, incrementando mis batallitas biográficas, porque siempre me sorprenden los recuerdos que me van apareciendo contando lo que me canta el pompis.

Por eso la entrada de hoy la título "es para ciscarse", en alusión remota a su contenido.

Y también por eso, hago una alusión inaudita, en el tránsito de este blog, al mundo escatológico.

Es una expresión  de artista y de  hartazgo a lo políticamente correcto y a no haber dicho un taco en toda mi vida, lo que es absolutamente impropio, por antinatural, en un naturalista.

Caca, culo, pis.

Ya está,

Continuo:

Habrás observado, cuando sales del baño después de evacuar, que dejas un mal olor a caca.

Pues has observado mal. Dejas un intenso olor a caca, no un mal olor a caca.

Porque eso que te huele tan mal, en muy pequeñas proporciones se utiliza como base de muchos cosméticos y colonias.

Sí, esa peste bien dosificada es una colonia.

Su origen son básicamente las sustancias orgánicas conocidas como escatol e indol que a pesar de que acaben en “ol”, que es como en química orgánica se suelen denominar a los alcoholes, no son alcoholes.

Son productos procedentes, por la descomposición de las bacterias del intestino, del triptófano, que es un aminoácido fundamental para nuestra existencia, que no lo producimos nosotros sino que lo tenemos que adquirir a través de los alimentos.

Bueno por hoy ya basta. Estoy desayunando y la entrada me está fastidiando las tostadas.

La moraleja es que no es oro todo lo que reluce, ni caca todo lo que huele a caca.

Cuando tus heces huelan a algo que no parezca a olor de heces, es que algo pasa.

Me pasó a mí con una sobredosis, muy sobredosis de anestesia.

Me dije; esto no huele a caca, esto huele a farmacia.

Sin duda estaba expulsando el exceso de anestesia.

Todo acabó bien y aproveché para escribir esta entrada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario