Homo sapiens versus Homo necius.

 

Foto: Libre en Internet.

Es una broma. No existe el Homo necius como especie, pero sí como actitud.

¿Por qué comento eso?

Como te he ido diciendo a lo largo de este Blog, lo que diferencia al hombre del mono, es decir, al animal racional del irracional, es el sentimiento de trascendencia.

Tiene ese sentimiento muchas expresiones y una de ellas es la creencia en una inteligencia creadora.

Esto no está reñido con la Ciencia, al contrario, la justifica.

En una entrada anterior, que titulaba Yo no soy ateo (jueves 2 de septiembre de 2021), te hablo de ello.

Pero a raíz de determinadas circunstancias me di en plantearme esa postura.

Y entendí que la mejor forma de hacerlo era buscar y estudiar ateos significados, algunos que ya había conocido y repasar sus argumentos.

Es esta una práctica peligrosa, pues cuanto más grosero es el error, mayor es la demagogia que lo arropa, hasta el punto que puede confundir a muchos.

Valió la pena el trabajo, pues me percaté de que los autores ateos utilizan dos estrategias que privan sobre los argumentos.

Una, ridiculizar al creyente y el concepto de Dios y otra, tergiversar los argumentos de los no ateos.

Son estrategias clásicas estalinistas, que han sido luego parte básica de los manuales de propaganda de los gobiernos totalitarios.

Si hablo de trascendencia hablo del ser humano en su estado natural y el tema tiene cabida en el Blog.

Pero si hablo de ateísmo entro de lleno en el terreno de la política, en cuanto trato de una manipulación, en cierto modo antinatural, del ser humano.

Es como lo que te comentaba de las flores silvestres y los híbridos de jardinería: las primeras son tema de este Blog, y las segundas las trato ocasionalmente.

Hay más. Dije en la entrada que te he citado, que los ateos tienen fe  y tragaderas y que yo no soy hombre de fe.

Me equivocaba por no conocer lo que debo entender por fe.

Al estudio concreto de concepto de fe, he dedicado varias horas para afianzarlo, al tiempo que trataba sobre el ateismo.

Todo va relacionado y nuevas respuestas generan nuevas preguntas.

No voy a aburrirte. Resumo:

Sí soy hombre de fe. He descubierto que de mucha fe. O, no.

Y el ateo no tiene fe, sí muchas tragaderas.

Por último, quiero aclararte que como Homo necius, me refiero a la primera acepción que la RAE da de necio, que no resta capacidad de saber.

Aquí no es un insulto, es señalar una carencia.

Postdata.

No te voy a orientar sobre la postura atea, que de sobras encontrarás referencias en Internet.

Pero si quieres entender sobre fe, te aconsejo una serie de cuatro homilías, especialmente la cuarta, de fray Nelson Medina OP.

Cuando oigas a un dominico (OP), tienes muchas garantías de oír y entender cosas interesantes, con argumentos bien articulados.

Son una gente especial.

Con un jesuita (SJ), (con notables excepciones como el padre Jorge Loring SJ, que falleció en 2013), corres más riesgos.

Es lo que pasa con las élites.

Me decía un veterano escolapio; los escolapios somos los jesuitas pobres.

p. Jorge Loring SJ. Foto: youtube.

Fray Nelson Medina OP. Foto: youtube.

Otra postdata, ésta a 2021.09.28.

Si lo que deseas es una visión rigurosa del Universo y de sus implicaciones, puedes conocer al p. Carreira, jesuita, asesor de la NASA, Teólogo, Astrónomo y autoridad competente en Ciencia pura. 

p. Carreira. SJ.

Entrada a la que me refiero más arriba:

Yo no soy ateo.