Páginas

sábado, 7 de septiembre de 2019

Taller escuela flotante.



Con la colaboración de los desaparecidos Talleres Pons de Barcelona, Asensi elaboró un proyecto de taller Escuela, a bordo de un barco mercante dado de baja.

Se trataba de que el barco fuera una base amarrada a puerto.

El barco, un transporte de aceites, tenía unas bodegas diáfanas muy espaciosas y todas las cubiertas de madera de teca, lo que le daba un aspecto no comercial, sino más bien de ocio, con un toque exótico.

No era un barco mercante convencional. Por eso enamoró a Asensi, que se vió apoyado por Manuel Pons, de los referidos talleres, una persona amante del mar y amigo de esas aventuras culturales algo locas.

El precio del barco era muy asequible, ya que nos encontrábamos en plena crisis de la marina mercante, por lo que su armador tenía un peso muerto que quitarse de encima.

Y su explotación resultaba asequible porque se trataba de un espectáculo inédito y muy atractivo, abierto a un abanico de población muy amplio. Las autoridades estaban entonces proclives y dispuestas a colaborar en la tramitación de permisos y demás.

¿Qué falló? No lo sabemos, quizás le dio un vértigo de última hora a Asensi... o quizás un afloramiento de sentido común.

Esto no impidió que durante años  siguiera buscando una sede estable para  esa actividad.



O puedes escribir en el buscador Atarfe, o Níjar, cuidando los acentos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario