Rio Nilo, en una zona de playitas. |
Voy a dedicar unas entradas al mundo egipcio, que
estos días he visitado de nuevo.
En esta primera imagen, he querido huir de la vista tópica de las pirámides, que son el icono egipcio del pasado, para centrarme en
el icono egipcio del futuro; la bandera de una nación y su pueblo.
Muchos creen que las egipcias, tapadas completamente
con telas oscuras, dejando a la vista solo los ojos, son víctimas de represión.
Pero en una ocasión me crucé muy de cerca con una de
esas mujeres que solo mostraba los ojos, unos ojos bellísimos, en los que no vi
ni represión ni sumisión.
Vi unos ojos de mirada inteligente que inspiraban
paz.
Me despertaron la certeza de que ir dentro de esas
ropas que las ocultan completamente al mundo, les satisface y las hace libres,
pues están aisladas de una sociedad, que para mí es decadente y corrupta.
Creo que esas mujeres son libres en su entorno y
están protegidas de un mundo incómodo.
En su ambiente más personal e íntimo, pueden
desarrollarse en toda su personalidad como no lo quieren hacer en la turba
urbana.
Ellas tienen lo que yo no tengo, un recinto de paz y
de intimidad.
Para la prensa decadente, ese es un atuendo signo de
represión machista y sin duda para una parte de la opinión musulmana también
lo será.
Pero si afinamos la visión, llegaremos a la
conclusión que te he comentado.
para la inteligencia oriental y occidental, esas ropas
son un ámbito de protección buscado por la mujer.
No tengo la menor duda de que si fuera una mujer
musulmana, vestiría de esa forma, por libre decisión y con la satisfacción de
saber de qué mi entorno más íntimo y personal está protegido de la basura que
me rodea.